Resuenan por todas las calles los apellidos clásicos de la noche: Botrán, Gallo, Venado y bajo de agua Cusha.
Los evangélicos están tomando "guaro en taza" para que no les dé color el pastor y no les "vuelen los privilegios": estampas clásicas de serenata.
Ya algunos sentenciaron a sus novias que osarán ir a interpretar las más bellas melodías a su balcón;
los suegros temerosos que la esquina amanecerá bien orinada y talvez algún acompañante del coro echará el "buitre".
No habrá más remedio que acarrear a alguno de "zopilotío".
La cubeta de agua fría está lista al centro del patio para volcarle a los infames serenateros que lleguen a amargar y evidenciarle a los suegros,
que ya son de la generación anterior y que la niña,
ya está siendo mujer y se aproxima la época de ser abuelos.
Y aún así, los enamorados huehuetecos se someten al desafío del agradecimiento con guacalada de agua helada u otro líquido más infame,
que pudiera antojarse, renal de toda la familia.
Hoy se gestarán muchos ciudadanos que nacerán bajo el signo de Cáncer o Leo; nacerán por la temporada de Fiestas Julias o las parrandas en Malacas.
ROMÁNTICA NOCHE. NOCHE DE AMORES.
ES LA NOCHE DE SERENATA DE MI HUEHUETENANGO.
Huehuetenango, 31 de octubre 2015
Edwin Rocael Cardona Ambrosio